Casi cada día vemos las personas que siguen estando en la parte más alto de la Torre de la Doncella y mirando a la ciudad. La mayoría de los visitantes que traspasan ocho pisos en el interior de la torre para estar en aquel punto, de hecho no son conscientes de que dejan atrás ocho pisos del gran secreto. Todos los pisos de la torre de 28 metros de altura es, como se suele decir, el tesoro en el que se protegen los secretos en la otra cara de la historia. Los pisos de forma redonda y que cada vez se estrechan más, durante muchos años, desean abrir aquellos secretos a los visitantes que llegan a la torre. Muchas veces no nos escuchamos a las piedras que esconden la formula de vitalidad de la memoria nacional, solo hemos subido a la parte abierta de la torre por el pasillo angosto y las escaleras estrechas y hemos mirado a la ciudad. Pero no fuimos conscientes de lo que la memoria de la ciudad a la que miramos por la planta novena del secreto de ocho plantas, y de sus habitantes está en aquellas ocho plantas y en cada pieza de piedra allí. En cuanto entramos dentro, entendimos que solo moverse en la Torre de la Doncella que actúa como museo desde 1964 y fue incluida en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO en 2000 era estar envuelto por la niebla de secreto. Nuestro guía, al principio mencionó el hecho importante sobre la historia de la torre:

"Al mirar atentamente a la Torre de la Doncella podemos ver que ella está compuesta de dos parte diferentes. Aquellas partes fueron preparadas de los diferentes materiales constructivos. Porque la torre misma fue construida en dos etapas. La parte inferior fue construida en los siglos VIII-VII antes de Cristo, en la época de los sumerios. Basándose en los principios religiosos, su vista inicial fue hueco por dentro y de forma cilíndrica. Las escaleras que se elevan hacia arriba fueron labradas".

En general, el cálculo de edad de la torre a partir del siglo XII es equivocado radicalmente. La torre, en este siglo fue elevado por el arquitecto Masud Davudoglu y se había completado su construcción. Masud Davudoglu que completó la parte superior del monumento escribió allí las palabras "Qülleyi-Məsud" ("la torre de Masud") con la letra kufi. Masud Davudoglu había elevado la torre con el fin de defender la torre del ataque enemigo. Sin embargo, Masud, el arquitecto del renacimiento musulmán del siglo XII también había reflejado los secretos de la arquitectura del Oriente en el monumento. Por lo tanto, se había prestado la especial atención a lo que la torre construida sobre la roca gigante se viera en forma de la cifra 9 al mirar desde arriba. Aquí, naturalmente, no se trata del hecho de que el edificio absolutamente parece a cualquier número. Aquí, 9 es solo una forma y los secretos de la arquitectura aplicados durante la construcción toma sus principios de aquí. Se hizo un esfuerzo para que el castillo se pareciera no solo a la cifra nueve, sino también a cachemira.

En la segunda planta fueron colocadas las pantallas electrónicas que indican las  funciones para las cuales fue construida la torre. Tal vez, los más importantes de las numerosas pantallas virtuales en la torre restaurada en 2014 están en esta planta.  Tres pantallas electrónicas presentan a los visitantes las tres funciones de la Torre de la Doncella por medio de imágenes con alto efecto. En la pantalla primera se muestran las animaciones que reflejan el hecho de que el monumento fue el lugar de culto de los zoroastrianos. El hecho de que la torre fue el monumento zoroastriano   se confirma en los mapas preparados por los ingenieros militares rusos del siglo XIX. Ellos llamaron a la Torre de la Doncella "Junsar" que significa "Ansar Sol" o "Castillo del Sol".

Los efectos en la pantalla apuntan al hecho de que la Torre de la Doncella fue el lugar santo de las personas que adoran el Sol. Según algunos científicos, muchos elementos en el castillo están previstos para observar el ciclo anual de las estrellas y el Sol y jugaron un papel importante en la vida de las personas antiguas.  

En la segunda pantalla se muestran las animaciones que confirman el hecho de que la Torre de la Doncella es el edificio con fines defensivos. La Torre de la Doncella que actúa como museo desde el año de 1964, principalmente fue introducida como el edificio con fines militares. También, los restos de armas y las piezas de madera encontrados durante excavaciones arqueológicas llevadas a cabo en la torre a los principios de 1960 confirman que ella fue usada para fines militares. Cuando se revisaban aquellas piezas de maderas en el laboratorio quedó claro que en la torre fueron usadas vigas demasiado gruesas y altas.   

En 22 de diciembre de 2008, mientras los científicos realizaban observación en la Torre de la Doncella se encontraron con un caso extraño: cuatro ventanas de un total de ocho del edificio en la arriba se fueron colocadas de manera que, en el 22 de diciembre, es decir en solsticio de invierno los rayos del Sol entrando por estas ventanas iluminaran el interior del castillo. Se supone que, precisamente en este día más corto del invierno, los sacerdotes llevaron a cabo ritos para la nueva ronda solar. El hecho de que la luz del Sol entra por esta parte a la Torre de la Doncella solo una vez durante el año, es un hecho realmente sorprendente.

El punto más sorprendente para los visitantes en la tercera planta es el pozo de agua. El pozo se ve solo en las primeras y terceras plantas. El hecho de que el pozo se ve no en la segunda planta sino directamente en la tercera planta es el secreto arquitectónico. En el pozo aún ahora hay agua. De acuerdo con las investigaciones llevadas a cabo en los laboratorios de los países extranjeros, el contenido químico del agua que está allí es limpio y está disponible para uso. También, el hecho de que  agua dulce en el pozo no se mezclara con agua salada del mar Caspio es un milagro.          

La planta quinta se llama "célula de leyendas" de la Torre de la Doncella. Aquí muchas leyendas relacionadas con la Torre de la Doncella fueron colocadas en la pantalla virtual electrónica preparada en forma de libro. Los turistas tocando aquel "libro" pueden cambiar las páginas y conocerse con cualquier leyenda de la Torre de la Doncella. La sexta planta principalmente está compuesta de las exposiciones que reflejan la función defensiva de la torre.